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  • Foto del escritorAGROTECNOLÓGICA

Todo el mundo habla de agricultura de precisión, pero poca gente la practica


Desde QAMPO han observado que en todas las reuniones que tienen con los productores de diferentes tamaños, salen entusiasmados con las herramientas que les ofrecen.

Hasta ahora habían conducido las plantas “a ciegas“, y en la mayoría de los casos obteniendo buenas producciones y calidades, gracias a la experiencia de los técnicos de campo. Lo que nadie nos puede discutir es que ningún productor ha sido capaz de optimizar el consumo de agua y fertilizantes, y es que esto es una tarea sumamente complicada si no se dispone de las herramientas de monitorización y análisis adecuadas.

QAMPO ofrece las herramientas para realizar esta acción, y lo hace de una manera simple e intuitiva para que sea entendible por cualquier productor.

Los sensores Qampo miden una gran cantidad de parámetros agronómicos, y generan otros tantos a partir del análisis de los datos medidos directamente por los sensores, el motor de análisis agronómico de Qampo transforma los datos en información útil para el producto y lo adapta a su lenguaje.

“Optimizar el consumo de agua y fertilizantes es complicado sin herramientas de monitorización”

Parámetros de suelo, tales como, la humedad, la temperatura, el contenido volumétrico de agua, la conductividad eléctrica o el PH, parámetros de agua, tales como el volumen de agua de riego, el caudal medio, el PH o la EC de agua de fertirrigación, parámetros ambientales, tales como, la temperatura, humedad, radiación solar o  velocidad del viento, permiten a Qampo conocer el estado de la planta en función de las condiciones climáticas actuales (contexto en el que crece la planta), y transformar estos parámetros en otros de mayor valor para el productor: ETo, necesidad neta de agua para el cultivo, estado de humedad del suelo, integral térmica, horas de frío, déficit de presión de vapor, modelos predictivos para la evaluación de la salud de la planta, etc.

Todos los sensores envían sus datos a través de los Qbic, dispositivos inteligentes (de fabricación propia) con capacidad de comunicación a la nube de Qampo, desde la cual, el cliente puede visualizar de forma gráfica los valores ya analizados, de tal forma que disponga de una herramienta de precisión para la toma de decisiones.


Qampo Cloud es una interfaz INTUITIVA, FÁCIL DE MANEJAR y DINÁMICA (en continua evolución).


Hay dos preguntas clave que todo el mundo hace:


Primera pregunta, ¿CUÁNTO ME VA A SUPONER LA INVERSIÓN?


Esta pregunta es lógica, el cliente quiere saber cuánto le va a costar disponer de este tipo de tecnología. No existe un precio exacto o medio ya que, las instalaciones dependen de multitud de factores como el tipo de cultivo, la extensión, qué parámetros se desea medir, etc.

Han estimado que del total de la inversión que se realiza en una campaña, puede llegar a suponer un 5% de ese total. Esta inversión en herramientas para agricultura de precisión de Qampo, nos va a generar un aumento de la producción entorno a un 30%.

Esto supone que no solo en el primer año vamos a amortizar la inversión, sino que además vamos a obtener un aumento de la producción y por consiguiente un mayor beneficio económico.


Segunda pregunta, ¿CUÁNTO AHORRO DE AGUA Y FERTILIZANTES NOS OFRECE EL UTILIZAR EL SISTEMA QAMPO?


La respuesta es clara, entre un 10-20% para los agricultores más eficaces en el manejo de la fertirrigación y un 20-35% para los agricultores menos precisos. Recordemos todos que el agua es un BIEN escaso que hay que utilizar con racionalidad, nuestras prácticas agrícolas deben ser SOSTENIBLES para que las próximas generaciones puedan seguir habitando en este planeta nuestro llamado TIERRA.

“Qampo permite ahorros de hasta el 35% en fertirrigación»

Desde QAMPO no se conforman con conocer algunos datos agronómicos, están en continuo I+D, ya que a medida que avanzan con los sensores descubren nuevas interrelaciones en la relación suelo-planta.

Son capaces de generar respuestas individuales y precisas a cada finca, garantizando la optimización del agua y abono, así como empezando a tener datos para poder tomar la mejor decisión.


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